Uno de los mayores triunfos del patriarcado ha sido convencer a muchas tías de que utilizar la sexualidad como herramienta sociopolítica y económica "está mal"... Se lo podrían explicar
ustedes a esta señora, de la especie Pan paniscus: Entienden muchas cosas cuando se les habla con lenguajes de signos, pero no se reboten si se parte de la risa. Estamos que inventamos algo, lxs humanxs...
Después
de haber corrido un estúpido velo acerca de la sociología sexual de lxs bononobxs (Pan paniscus), durante casi un siglo, la mediática oficial amenaza con convertir a esta especie en icono de referencia para ni se sabe qué pedagogías
de lo políticamente correcto. El caso es que el bonobo es poco menos violento que el chimpancé común, ya que cazan y guerrean banda contra banda con frecuencia... Y no viven en grupos matriarcales como sugiere el artículo, sino
en bandas patrilocales y patriarcales dirigidas por los machos, igual que los chimpancés. Lo que sucede es que al practicar una sexualidad diversa, abierta, comunitaria y orgiástica, se reduce el nivel de conflictos dentro de una misma banda.
Además, mediante el lesbianismo, las hembras hacen coaliciones gracias a las cuales equilibran el poder de los machos... Es fundamental entender en sus justos términos cómo funciona una población de Pan paniscus para llegar a comprender
lo que sucedió con Homo ergaster hace casi dos millones de años y lo que acontece hoy con Homo sapiens. Pero éstas ya son otras historias...
J. Ramón Rosell