Texto y dibujo: J. Ramón Rosell
Llamamos "cabezas de serie" a las especies vegetales que resultarían dominantes en las comunidades clímax (Recordemos: Máxima potencia, máxima biomasa, máxima estabilidad), en correspondencia con variantes ambientales a diferentes escalas. De momento, vamos a descontar las series y comunidades ligadas de forma exclusiva a incrementos de humedad en el sustrato, y aquellas otras que aparecen sólo en correspondencia con sustratos muy propensos a perder humedad, por que sobre esto hay mucho que matizar y revisar para entornos secos, semiáridos y áridos... Así; quedándonos solamente con los casos que suelen aparecer en correspondencia con el clima y con microclimas de relieve, y también con variantes de sustrato de escasa significación; hay establecidas siete especies como cabezas de serie para grandes extensiones. Por orden de resistencia a la escasez de agua y de mayor requerimiento de calor, éstas son: Quercus rotundifolia, o carrasca, Quercus coccifera, o coscoja, Ziziphus lotus, o loto, Maytenus europaeus, o arto, Pistacia lentiscus, o lentisco, Tetraclinis articulata, o sabino, y Periploca laevigata, o cornical. Hay que remarcar que las posiciones relativas de Ziziphus y Maytenus son fruto directo de la aplicación de nuestros métodos de interpretación de variantes y también de pruebas experimentales consecuentes, y que están en contradición con datos documentales muy al uso. Esto podría deberse a la extrema complejidad y sutileza que en el Sureste Ibérico presentan los mecanismos de compensación de humedad, y lo difícil que resulta describirlos desde otras referencias territoriales, así como desde modelos teóricos creados desde y para otros supuestos. Por otra parte y a efectos prácticos, cabría considerar a las dos esparragueras recogidas en el gráfico, como cabezas de serie para situaciones climáticas restringidas en superficie, pero de gran significación: Venimos utilizando ambos Asparagus como especies indicadoras, a A. albus como resistente a sequía estival, con nivel similar a Periploca pero mucho más tolerante al frío, por lo que puede vivir en franjas inferiores del semiárido termomediterráneo, vetadas a palmitos y espinos. Donde aparece A. horridus como único elemento autóctono de la clímax, indica sequías intensas sucedidas fuera del período estival, en general sin patrón regular que se repita año tras año... Pero el caso es que ésta última especie tiene límite de resistencia a la escasez de humedad, y en muchas zonas de condiciones áridas se muestra incapaz de instalarse en la matriz del territorio, dependiendo ahí de la compensación localizada de humedad. Da para mucho la interrogante abierta respecto a potenciales cabezas de serie y a comunidades clímax en entornos áridos de la Iberia Mediterránea. Y va a dar mucho más en el futuro, por que las tendencias de calentamiento global amenazan con expandir la estepa murciano-almeriense en todas las direcciones posibles. El caso es que las especies adecuadas para formar comunidades maduras en dichas condiciones que actualmente podemos encontrar en el continente europeo, no han venido hasta aquí ni por mérito propio ni por vectores naturales. Y lo mismo sucederá para otras que aun están por por llegar...
Pintura de acrílicos sobre tabla prensada; que representa la comparación de una garriga natural de semiárido y un huerto permacultural; hecho este último a imitación de la primera, por J. Ramón Rosell
"Solo alcanzaremos la definitiva seguridad alimentaria cuando la gente viva sumergida en masas de vegetación comestible: Sabanas, junglas y bosques cuidadosamente diseñados y gestionados para cubrir todas nuestras necesidades alimentarias, energéticas y ambientales de forma duradera y en el sitio. Esta crisis no tiene vuelta atrás: Solo acabará cuando se consume una transformación cultural y tecnológica, amplia y profunda, en la línea que marca la permacultura ("permaculture", en inglés y francés) y otras corrientes similares: Que los remedios; necesarios y admirables; no nos impidan buscar y encontrar las soluciones.
"
J. Ramón Rosell
Pueden ver ustedes en corte transversal un patrón muy utilizado en permacultura, para trabajar en grandes extensiones planas o de relieve suave. Los cordones forestales están estratificados a imitación
de los bosques naturales: Los árboles más altos son los más resistentes, y a su abrigo son instalados otros más pequeños y delicados. Se pueden dedicar a producción maderera y frutal en diferentes proporciones, y bajo
el arbolado hay encaje para verdura subforestal, viveros o refugios de fauna. Por las calles despejadas puede circular el personal y la maquinaria para recolección y otros trabajos, y se pueden ocupar con pastizales,
verdura que necesite más luz; tanto a riego como en secano; y matas aromáticas. El suelo maduro que; por supuesto; no se labra, crece progresivamente a partir de hojarasca seca y paja, y acumula en cantidad sobrada los nutrientes que las plantas
necesitan. La maraña de raíces atrapa los nutrientes que pudieran escapar de los niveles más superficiales. A la vez extrae agua desde niveles profundos y ejerce así funciones de riego biológico. La composición concreta
de especies vegetales a utilizar en cada caso, requiere minuciosos trabajos de investigación y diseño. Estos han de tomar en cuenta los marcos ambientales naturales, las modificaciones que se puedan crear mediante riego sostenible y otras intervenciones,
las correspondencias de marco ambiental y comunidad biológica, las equivalencias entre especies autóctonas y otras de procedencia exótica, y cuestiones de mercado y distribución...
Esto y algunas cosas más es lo que
necesitamos en la cuenca del Mar Menor para que éste vuelva a tener aguas transparentes, y también es lo único que permitirá al sector agroalimentario comarcal, sobrevivir en tiempos de potencia decreciente... Como se puede ver
se trata de un proyecto que, de momento, no concuerda con la mentalidad más extendida, y tampoco es tarea fácil ni cosa de dos días. Así que lo más seguro es que no se lleve a cabo en el futuro inmediato; es decir, a tiempo;
y me van a permitir que me sitúe en el peor de los supuestos:
El Mar Menor ha sido alternativamente golfo, laguna litoral; como ahora; y quizás también marisma, de lo que va camino... Solemos decir que se está muriendo, pero puede que no sea así y en realidad lo que esté haciendo sea defenderse ¡Y de qué manera!
Comentarios
28.10 | 23:39
Me ha encantado , ya hablaremos cuando tengas tiempo
06.09 | 00:08
matrix agroganadero, jajaja, toda la razóm. La natura siempre se organi...
01.08 | 10:49
Hola Carmen soy Antonia, quisiera me metas en el grupo de whatsap...
12.10 | 07:31
Increíblemente interesante, voy a estudiarlo en detalle. Gracias.