"Aquí les presentamos una maquinita de hacer comida. Consiste en una charca con ribera interior. Antes le pusimos macetas por casi todo el perímetro: Fue una tontusiada y la hemos corregido, por que así el espacio se aprovecha mejor, las plantas enredarán sus raíces, podrán asociarse y competir a su bola, y se organizarán de la mejor forma posible sin que tengamos que ocuparnos mucho de sus problemas personales... La charca está en el medio de una zona de huerto de invierno que dentro de poco se habrá convertido en un bosque de comer cuyos árboles ya están creciendo. Es en la parte sur de la casa, donde en su día plantamos un seto de hoja perenne para cortar los vientos fríos, y ahora tiene que estar Europa entera tiritando para que aquí haya que abrigarse. En esa charca y en otra cercana que aún está a medias, crían las ranas. Como ya explicamos hace unos meses, estas son fundamentales si quieres que el huerto produzca caracoles de sobra; también para comer; ya que actúan como superdepredadores y limitan las poblaciones de depredadores intermedios. Igual que los leones en la sabana."
Fuente Vieja