En el Sureste el aguila perdicera es la que manda: Se impone "militarmente" a la real, aunque ésta puede con ella a medio plazo por competencia "económica" en climas frescos: La perdi es mediana y es más
de lagartos ocelados y de gazapos que de conejos adultos, mientras que la reina no tiene problemas para transportar... Así que necesita lagartos activos en invierno y lagomorfos reproduciendo en esa misma estación. Es decir: Calor, litoralidad,
termomediterráneo... En los tiempos de la gran persecución; cuyo retorno la diosa no permita; las reinas y las emperatrices caían como moscas, mientras que las perdis; listas como monos; jugaban al escondite... Así fue como esta
última desplazó a las otras dos. Y ahora, en tiempos de calma relativa, ambas recuperan lo suyo... A medio plazo; a medida que el cambio climático expanda la estepa murciano-almeriense hacia La Mancha; la perdi volverá a conquistar
nuevos territorios.
J. Ramón Rosell