JEB Ingeniería Forestal

 
La Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de bosques (REDD+) es un mecanismo que tiene por objetivo reconocer el servicio ecosistémico de almacenamiento de carbono que prestan los bosques, y que se orienta a incentivar el reemplazo de prácticas generadoras de procesos de degradación y deforestación de coberturas forestales por otras que permitan la disminución de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero asociadas a esos cambios en el uso del suelo,
Si bien inicialmente se planteó que el incentivo se orientara exclusivamente a reconocer el almacenamiento de carbono de áreas forestales con altos contenidos de carbono y fuertes presiones de deforestación o degradación (lo cual se conoce con la sigla REDD), con el tiempo se viene incluyendo un enfoque más amplio que reconozca otras actividades elegibles para este mecanismo, tales como la conservación de los stocks de carbono, la gestión sostenible de los bosques y el aumento de las reservas forestales en los países en desarrollo (CMNUCC 2007), lo que ahora se conoce como REDD+ (REDD+ “plus”). Más aún, y debido a que el mantenimiento de las coberturas forestales puede redundar en diversos beneficios en la conservación de la biodiversidad y en algunos servicios ecosistémicos, así como otros beneficios de tipo social asociados a la conservación, existen diferentes propuestas orientadas a monitorear dentro de los proyectos este tipo de COBENEFICIOS (Busch et al. 2010) como parte integral del mecanismo REDD+ o REDD+.

Tanto el enfoque centrado en reducir el riesgo de deforestación/degradación (REDD), como los que reconocen la importancia de mantener los stocks de carbono y aumentarlos independientemente del nivel de riesgo actual (REDD+), como aquellos que pretenden el reconocimiento y monitoreo de beneficios sociales y ambientales dentro del mecanismo REDD+ (COBENEFICIOS) tienen tanto defensores como detractores, pues sus implicaciones técnicas, financieras, sociales y ambientales son diferentes.

Sin embargo, dada su naturaleza de instrumentos de mercado, serán precisamente los mercados y la disponibilidad de recursos para este tipo de actividades quienes determinen, con base a las reglas definidas a nivel internacional (tanto en los mercados regulados como voluntarios) no solo la viabilidad de cualquiera de estos acercamientos, sino también del precio que puedan llegar a recibir los certificados que se generen para cada tipos de actividad. Siendo muy probable que a futuro lleguen a coexistir las tres alternativas, pero con diferencias importantes en cuanto a la escala del mercado que tenga cada una, así como de la retribución por cada bono transado.

Con todo y eso, vale la pena reflexionar si se desea que tanto las formas orientadas a frenar la deforestación actual como la potencial deban incluir unos mínimos que garanticen aportes sociales y ambientales más allá del aporte de recursos y del mantenimiento de las masas boscosas, es decir, que les sea exigible cierto nivel de internalización de los costos asociados al seguimiento de los cobeneficios.

En todo caso, lo claro es que si el mecanismo REDD+ se desarrolla de manera adecuada, podría aportar a mantener ecosistemas sanos, proveedores de múltiples bienes y servicios ecosistémicos, los cuales tienen potencial tanto para la mitigación y la adaptación frente al cambio climático (UN-REDD, 2009).

Fuente FINANZAS CARBONO

Comentarios

28.10 | 23:39

Me ha encantado , ya hablaremos cuando tengas tiempo

06.09 | 00:08

matrix agroganadero, jajaja, toda la razóm. La natura siempre se organizó a si misma para todo lo que cayera al suelo se aprovechara.

01.08 | 10:49

Hola Carmen soy Antonia, quisiera me metas en el grupo de whatsapp con el 699769996 el frances lo he dado de baja.
Muchad Gracias.

12.10 | 07:31

Increíblemente interesante, voy a estudiarlo en detalle. Gracias.