El límite del bosque, límite de crecimiento de árboles, límite arbóreo o línea de los árboles, es
como se designa a la línea imaginaria que marca el límite del hábitat en el que los árboles son capaces de ...crecer. Más allá del límite
del bosque las inadecuadas condiciones ecológicas no permiten el crecimiento, ya sea por las temperaturas frías, la falta de presión de aire, la falta de humedad o las condiciones del suelo.
El límite superior del bosque
surge en las montañas, marcando, para cada latitud y condición climática, el límite de altitud máximo de expansión de los árboles, y en las regiones circumpolares, marcando la latitud más elevada que
está permitida para los bosques.
En la línea arbolada, el crecimiento de los árboles es a menudo muy raquítico, con la última formación enmarañada de árboles bajos y arbustos. Si es causada
por el viento, se conoce como formación krummholz (del alemán krumm (curvado, torcido) y Holz, (madera): krummholz, «madera retorcida»).
La línea arbolada, como muchas otras líneas naturales (los límites
de un lago, por ejemplo), aparece bien definida desde la distancia, pero en un reconocimiento lo suficientemente cercano, se trata de una transición gradual: los árboles crecen más bajos en dirección a la zona más inhóspita
hasta que simplemente dejan de crecer.
Existen varios tipos de líneas arboladas definidas en ecología y geología:
Límite superior del bosque
o límite arbóreo alpino.
Señala los lugares de mayor altitud en que los árboles pueden crecer:
más arriba, está demasiado frío o la tierra permanece cubierta de nieve durante demasiado tiempo. El clima por encima de la línea arbolada (en general asociado con zonas de montaña) es llamado clima alpino y el terreno puede
ser descrito como tundra alpina. En las montañas las líneas arboladas de las laderas expuestas al Norte son más bajas que las laderas orientadas al Sur, porque en las zonas de fuertes sombras lleva más tiempo derretir la nieve y
ello reduce la temporada de crecimiento de los árboles.
Límite arbóreo desértico. Señala los lugares más secos en que los árboles pueden crecer. Las
zonas desérticas secas tienen insuficientes precipitaciones para sostener los árboles. La línea arbolada desértica tiende a ser menor en laderas orientadas al Polo que en laderas orientadas al Ecuador, porque la mayor sombra permite
temperaturas más frescas y disminuye la evaporación, lo que conserva la humedad del suelo más tiempo, dando una temporada de crecimiento más larga.
Límite arbóreo
desértico-alpino. En algunas zonas montañosas, las zonas más elevadas por encima de la línea de condensación o laderas de sotavento (las laderas orientadas al Sur en el hemisferio norte y las laderas orientadas al
Norte en el hemisferio sur) pueden dar lugar a la escasez de precipitaciones y el aumento de la exposición a la radiación solar. Esto seca el suelo, resultando un entorno árido inadecuado para los árboles. En las montañas
occidentales de los EE.UU. muchas crestas orientadas al Sur tienen menos árboles que las orientadas al Norte debido al aumento de la exposición al sol y la aridez.
Límite arbóreo
por exposición. Señala los lugares aislados, en las costas o montañas, en que la línea arbolada es mucho menor que la que correspondería por altitud o latitud en esa misma zona, a causa de los fuertes vientos que reducen
el crecimiento de los árboles. Además, la falta de suelo adecuado, como en fuertes taludes o en formaciones rocosas desnudas, evitan que los árboles obtengan un adecuado sustento para su enraizamiento y los exponen a la sequía y
al sol.
Límite arbóreo ártico. Señala los lugares más al Norte en el hemisferio norte en que los árboles pueden crecer: más al norte, hace demasiado
frío y las temperaturas extremadamente bajas puede dar lugar a la congelación de la savia en el interior de los árboles, causando su muerte. Además, el permafrost en el suelo puede impedir que los árboles logren que sus raíces
alcancen suficiente profundidad para el necesario apoyo estructural.
Límite arbóreo antártico. Señala los lugares más al Sur en el hemisferio sur en que los árboles
pueden crecer: más al sur, hace demasiado frío para mantener los árboles. Se trata de un concepto teórico que no tiene ningún lugar geográfico determinado: no existen árboles en la Antártida o en las
islas subantárticas, y más al al norte no hay masas de tierra en que pueda aparecer una verdadera línea arbolada.
Otros límites arbóreos.
Señalan límites de entornos demasiado extremos para que los árboles crezcan. Esto
puede ser causado por la exposición geotérmica asociada con aguas termales —como en Yellowstone, o cerca de un volcán—, por la alta acidez del suelo —cerca de los pantanos—, por altos niveles de salinidad —asociados
a playas o lagos salados—, o por que están demasiado saturados de agua subterránea (lo que excluye el oxígeno de la tierra, que las raíces de los árboles necesitan para el crecimiento) —márgenes de muskegs
y pantanos; sin embargo, no existe la línea de pantano, ya que especies como el Calva ciprés y otras muchas adaptadas a los manglares pueden crecer en suelos anegados permanentemente.