Un banco de bonitos se ha comido chiquicientas caballas en una sola mañana. El gremio de criadores-mimadores-atontadores de caballa ha puesto el grito en los fondos abisales, pide astronómicas indemnizaciones para reparar los daños causados y que se autorice exterminio sistemático de los peces asesinos. Por que son malos y paque escarmienten de una vez por todas... ¿A que suena ridículo? Pues lo del lobo igual: Sólo es cuestión de resituar el punto de vista.