"Luego las ventajas competitivas proporcionadas por el fuego dependen sobre todo de la intensidad y termicidad de éste que a su vez depende a la inversa de la humedad en presencia. Los fuegos muy intensos favorecen a los pinos (excepto al canario) y a otras piropioneras, que mueren y recolonizan de semilla, mientras que provocan alta mortalidad en pirorresistentes, sobre todo pequeñas, tanto herbáceas como leñosas. La situación se invierte en fuegos poco térmicos en los que la regresión de las piropioneras es tanto mayor cuanto mayor haya sido la implantación previa de pirorresistentes."
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